Llevas muchos años recorriendo tu pequeño universo y lejos de ir conociéndolo, se vuelve más extraño e inmenso. Tal vez no era tan pequeño como tú suponías. Tal vez no era tan fácil de manejar. Pero a veces, en esta travesía encuentras algunas islas muy remotas donde habitan las razones que te hacen seguir pintando, y aunque lo más sensato sería acomodarse en este paraíso, rápidamente lo abandonas para seguir indagando, aún a riesgo de perder el rumbo definitivamente.

Ya ha pasado demasiado tiempo desde que participé en una muestra de pintura y la verdad es que me había propuesto dedicar más tiempo a mostrar mi trabajo y no sólo a pintar, aunque reconozco que es más sencillo lo segundo que lo primero. Por suerte siempre encuentras a personas en el camino que te brindan una oportunidad como la presente y que además de facilitarte la tarea, te enriquecen con su amistad. Por eso quiero desde aquí, dar las gracias a Emilio Baratas, a Eva Cabezas y a Adolfo Montes, grandes artistas, pero sobre todo amigos, por facilitarme las cosas y echarme una mano.

También quiero agradecer al Ayuntamiento de Guisando el haber hecho posible esta exposición colectiva.

Os invito a visitar Guisando y su bellísimo entorno (del cabrito al horno, ni hablamos…) y de paso un poco de arte.

No te lo pienses y aprovecha esta oportunidad.